E.S. es un niño de 10 años al que le encanta jugar. Y lo hace a menudo con sus cuidadoras de Care Options for Kids, Samantha Narvaez y Catoya Johnson,
E.S. es autista y no habla. Lleva más de un año recibiendo cuidados a domicilio de Care Options for Kids y le encanta pasar tiempo con sus nuevos amigos. Espera con impaciencia sus visitas, que tienen lugar cinco veces por semana. También ha establecido rutinas con cada uno de sus cuidadores.
"Elegimos a sus cuidadores porque se llevó muy bien con ellos desde el principio", explica su padre, John. "Eso era lo más importante para nosotros. Queríamos que se sintiera cómodo".
Como hablar puede ser un reto para E.S., utiliza un iPad para comunicarse cuando le cuesta transmitir algo con claridad. Sus dos cuidadores han aprendido a entenderle y a interactuar bien con él.
"Jugarán juntos. Salen a pasear, saltan en el trampolín, dan patadas a una pelota o le empujan en el columpio", dice John. "A veces quiere estar dentro, así que colorean, hacen puzzles o juegan al Jenga. A mi hijo le encanta jugar al Jenga con Sam".
Sus cuidadores también le han ayudado a ser más independiente en las actividades de la vida diaria, como ir al baño, bañarse y lavarse los dientes. Además, aplican el plan de Análisis de Conducta Aplicado (ABA), diseñado por el técnico de conducta de E.S.
John expresa que recibir cuidados a través de Care Options for Kids ha sido una experiencia realmente buena: "Hemos trabajado con otras agencias en el pasado y a veces los cuidadores no estaban totalmente presentes en sus turnos. Con Care Options for Kids no ha sido así en absoluto. Son geniales con él y le encantan".
Los cuidadores de Care Options for Kids también han sido buenos para los padres de E.S.: "Se han convertido en parte de la familia", explica John. "Nos dan un respiro. A mi hijo le encantan y está aprendiendo mucho por el camino".